En el mercado de bienes y servicios la principal premisa que lo sustenta es vender por más del precio de coste de adquisición o fabricación. Partiendo de ahí las empresas buscan mil y una manera diferente de conseguir reducir los costos para obtener más beneficio, sin perder calidad. Porque eso de que importa más la calidad que la cantidad no es cierto.
Las empresas normalmente buscan reducir el coste de fabricación aplicando medidas para optimizar el máximo el proceso de fabricación, distribución y venta. Estos procesos pueden generar gastos que repercuten en el precio final del producto, y reduciéndolos los beneficios pueden aumentar de manera considerable.
El personal es uno de los aspectos más valorados a la hora de hacer reducción de costes, ya que en España el empresario debe de pagar grandes sumas de dinero en concepto de seguros sociales. Y es sonado que cuando una empresa tiene que hacer una reducción de gastos, lo primero que se reduce es la plantilla de trabajadores con los famosos expedientes de regulación de empleo.
En cualquier caso, las empresas tienen que saber que lo que más renta es comprar los materiales para fabricación de productos o prestación de servicios lo más barato posible. Y esto es algo que solo se consigue comprando al por mayor en naves industriales.
Las compras al por mayor son bastante especiales, pues se pueden llenar trailers llenos de mercancía con el fin de reducir el precio por unidad de los artículos que se compran. A continuación, vamos a ver cuáles son las principales ventajas, para las empresa, sque existen en las compras al por mayor.
Las ventajas de comprar al por mayor
Lo más destacable es el ahorro. La primera ventaja que nos encontramos al comprar al por mayor se relaciona con el ahorro y es que, si llegamos a una cierta cantidad, será mucho más barato que si compramos tan sólo un par de unidades. En estos casos la calidad y la cantidad cuenta, pues el precio de compra de altas mercancías siempre permite jugar con el precio a tu favor.
Respecto a los gastos de envío no siempre tenemos porque pagarlos. El principal problema de los pedidos son los gastos de envío que ya se llevan una buena parte de nuestro presupuesto. Sin embargo, al pedir mayores volúmenes de artículos, aunque los gastos de envío también aumentan, lo hacen en menor proporción que si estuviéramos comprando los productos de manera individual. Por ello, también conseguimos ahorrar bastante al no tener que pagar tantos gastos de envío.
Aunque dependiendo en qué sectores los gastos de envío no se contemplan por suceder los negocios de manera física. Pensemos en el sector de la restauración o la fruta o verdura. En estos casos lo norma es acercarse al mercado mayorista local para adquirir los productos más frescos al mejor precio.
Este tipo de mercados mayoristas locales se encuentran en muchas provincias, y MercaMurcia es uno de los más importantes por situarse en la huerta de Europa, pues está ubicada en un recinto de 300.000 m² de superficie, cuenta con Mercados Mayoristas de Frutas y Hortalizas, Pescados, Flores y Plantas, Complejo Cárnico con matadero de especies de abasto (porcino, bovino y ovino) y Zona de Actividades Complementarias donde se ubican empresas de distribución y productos complementarios.
Variedad de proveedores. Por otra parte, tienes que saber que para el proveedor es mucho más rentable vender estos artículos al por mayor. Por ello, la gran mayoría de ellos tan sólo trabajan con esta fórmula de venta.
En cualquier caso, existen muchas plataformas en Internet que te ayudarán a encontrar exactamente el tipo de producto que estás buscando, por lo que tan solo debes de ir comparando hasta encontrar la que más se adapte a tus necesidades. Y si bien Amazon es el mejor ejemplo de mercado minorista, Alibaba es el ejemplo de mayorista.
Lo mejor de comprar al por mayor es prescindir de intermediarios. Además de todos los puntos claves anteriores, con este tipo de compra podemos interactuar directamente con el fabricante, evitando la aparición de intermediarios que lo único que van a hacer es encarecer el precio del producto final.