Que hemos salido de la crisis y ahora estamos en un proceso de recuperación económica es algo que se repite hasta la saciedad. Y el hecho de que cada mes los datos del desempleo mejoren no hace más que demostrar la recuperación. Pero todavía tenemos un problema de base en España, y es una normativa laboral que no está actualizada acorde con los tiempos.
No vamos a hablar de si la normativa laboral es o no la más adecuada, pero lo que es cierto es que cuando te pones a comprar un dato tan simple como el sueldo base, nos damos cuenta de que no está acorde con el nivel de vida. Cada vez los precios son más altos, y los empleos fijos cuestan de encontrar.
Por estos motivos, y por muchos otros más que darían para tres o cuatro artículos, mucha gente que ha conseguido ahorrar dinero se plantea montar un negocio. Muchas personas tienen el sueño de dirigir una empresa, y tenemos el típico caso de los bares. A la hora de elegir que tipo de negocio se quiere llevar hay que decidir entre dos tipos, el negocio independiente y la franquicia.
En negocio independiente es la clásica sociedad limitada cuyo objeto social puede ser cualquier empresa formada por uno o varios socios, en las que se crea un negocio desde cero. Un ejemplo puede ser un restaurante de cocina tradicional, que no tiene ningún rasgo característico de otra empresa.
La franquicia es un negocio que ya existe, tiene una marca y diseño industrial, una manera de trabajar y sobre todo clientela. En una franquicia, el franquiciado paga una serie de cánones y porcentajes, a cambio de un negocio ya montado en el que se incluye asesoramiento para que funcione lo antes posible.
Porqué una franquicia obtiene éxito
Pues bien, hay que tener en cuenta que cuando inicias un negocio hay que controlar muchos aspectos del mismo. Por un lado tenemos la gestión propia del negocio, es decir, llevar a cabo el objeto social. Y por otra tenemos el aspecto organizativo, que consiste en cumplir con los requisitos fiscales y legales.
El principal problema es que en la escuela no nos enseñan a emprender con éxito, y dar con la clave es muy difícil. En contraposición, las franquicias ya cuentan con un sistema de aprendizaje validado y testado en el mercado. Esto ocurre gracias a que tienen un sistema que les permite medir los datos que obtienen en los locales y los comparan con el mercado.
El objetivo de todo esto es obtener un resultado predecible dentro de un sistema complejo como es el de los negocios. Esto es lo que realmente beneficia a la franquicia respecto el negocio independiente. En el segundo nadie promete que vayas a tener éxito, pero en el primero existen probabilidades de que si que lo tengas.
Un ejemplo de franquicia de éxito es Reprepol, un proveedor mayorista especializado en la venta de artículos de moda infantil, que tademás ofrece la posibilidad de formar parte del negocio mediante franquicias que consisten en tiendas multimarca o monomarca, con todo el respaldo y la ayuda del Grupo Reprepol.
En conclusión, una idea muy interesante para montar un negocio es siempre buscar una franquicia rentable a la que adherirse, porque las posibilidades de éxito son siempre más altas en comparación con los negocios independientes.