La industria textil es una de las más importantes de España, y como en todos los aspectos de la vida, ha tenido que adaptarse a la evolución social y tecnológica de los nuevos tiempos. Es impensable trabajar hoy de la misma manera en la que se trabajaba hace 200 años, y los avances tecnológicos han impulsado una nueva forma de pensar y de trabajar dentro de la industria textil.
La evolución tecnológica en la industria textil se debe a la necesidad imperiosa de responder a la demanda de productos textiles a nivel mundial, y a la forma en la que el mundo accede a ellos. En la actualidad las fronteras son delgadas líneas que se ven difuminadas por la comunicación global que nos permiten las tecnologías, por lo que las tendencias se conocen a tiempo real, vengan de donde vengan.
Es evidente que el ciudadano de a pie no tiene el conocimiento que implica la creación de cada pieza que existe en su guardarropa, pero sí sabe qué le gusta en una prenda, cómo y dónde comprarla, por lo que la industria textil ha tenido que modernizarse para alcanzar los mejores estándares de calidad y para cubrir las necesidades que el consumidor de hoy tiene, y no solamente en el aspecto de moda, sino en todos los rubros, puesto que lo textil se utiliza en todos. Una empresa que trabaje con fundición de metales, necesita de un equipo se seguridad para sus empleados que les garantice el menor peligro posible, la industria textil interviene en eso, igual que interviene en la Semana de la Moda de Madrid.
Es por ello que hablar de la tecnología en la industria textil es importante si se quiere emprender dentro de este rubro y tener asegurado un par de pasos en el camino del éxito. Por ello, desde los especialistas en maquinaria textil de Jorge Sempere S.L, quienes tienen más de 140 años de experiencia en el área, nos explican la importancia de las tecnologías en la industria.
¿Cómo integrar la tecnología en la industria textil?
De hace unos años para acá, hemos visto cómo se vuelven virales prendas de ropa que tienen particularidades que no sabíamos que podían tener, y es que la tecnología no sólo depende de la maquinaria que se use para el hilado, corte o ensamblaje de piezas, sino en la constitución propia del material textil, el uso de fibras inteligentes, microelectrónica, nanotecnología y sensores está cada día más en boga, y permite la creación de piezas muy interesantes, pero sobretodo, útiles para mucho más que ropa de uso cotidiano, y compartiremos algunas de los usos destacados que tienen dentro del mundo textil:
- Nanotecnología: El uso de la nanotecnología en la industria textil ha dado una serie de avances entre los que podemos destacar la repelencia al agua y a las arrugas, propiedades antiestáticas, control de olores, funciones antibacteriales y bloqueo de rayos UV, entre muchos otros.
- Sensores: La implementación de sensores en diferentes textiles, nos permite medir cualquier información del cuerpo mediante la conexión a Internet, y de esa forma conocer datos de forma inmediata.
- Fibras Inteligentes: Son aquellas que pueden reaccionar ante la variación de estímulos tales como la luz, el calor, el sudor, etc, en el lugar donde se produce dicha variación, pero que se comportan como fibra normales allí donde el estímulo no actúa.
- Microelectrónica: Integran sensores y microchips que detectan y analizan estímulos proporcionando una respuesta. Tiene gran aplicación en el campo de la salud pudiéndose controlar el ritmo cardíaco del portador, la respiración, su temperatura, y un amplio abanico de funciones vitales, alertando al usuario o al médico si se detecta algún problema.
La impresión 3D dentro de la industria textil
El uso de las impresoras 3D es amplio y ha traído consigo maravillas tecnológicas que permiten la mejora de la calidad de vida de miles de personas, ¿a qué se debe esto? A que mediante ella, podemos realizar una infinidad de elementos en menor cantidad de tiempo, dando respuestas inmediatas a necesidades inmediatas. La tecnología de impresión 3D se ha colado de forma inteligente y efectiva en el mundo de la salud, en el de construcción y el textil no se ha quedado atrás.
El proceso tradicional de la creación de una pieza textil, suele constar de varias fases: la creativa que va en el papel, la de creación de prototipos, el desarrollo de esos prototipos para el visual general, la de correcciones, y por último la definitiva, y esta es la que llega a manos del consumidor. Evidentemente estas fases son mucho más complejas y mucho más delicadas, pero para los efectos, el proceso se resume bien de esta forma.
Ahora bien, dentro de la industria textil, el uso de las tecnologías 3D, genera múltiples beneficios que no solo generan reducción de costos en materiales, sino que también permite perfeccionar y reducir el tiempo invertido en producción.
Las tecnologías han avanzado tanto que en la actualidad que los software de simulación 3D son lo suficientemente maduros para probar cortes en avatares de tamaño virtual, así como colores y patrones. Los pliegues y el movimiento de los avatares también se simulan de forma realista, lo que permite una visual general desde el comienzo de la fase creativa. A su vez, permite la reducción de costos evitando los prototipos innecesarios y los tiempos de espera entre uno y otro, puesto que el proceso se hace más rápido, más eficiente y más económico.
Desde hace un par de años se ha comenzado a ver en las pasarelas más famosas del mundo, el uso de impresiones 3D para la creación de piezas de alta costura, por lo que es indiscutible que en un futuro no muy lejano, los tejidos provenientes de una impresora 3D podrán ser mucho más moldeables y cómodos, de forma que llegue a un público mucho más variado y que se pueda acceder a ellos de forma más simple.
Textiles orgánicos
La protección del ambiente es uno de los aspectos que toda empresa debe tener en mente a la hora de trabajar, ya no solamente como una decisión corporativa, sino como una obligación, que parte de las Naciones Unidas y que obedece al cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible.
Evidentemente la industria textil debe sumarse a estas medidas de protección y una de las formas de hacerlo, es trabajar con textiles orgánicos, este tipo de textiles tiene su particularidad en que desde el primer momento, las fibras naturales están libres de químicos lo que reduce significativamente la contaminación que se genera en la producción tradicional de tejidos. Los materiales orgánicos que componen este tipo de tejidos no contienen ni pesticidas ni fertilizantes, y la materia prima que se suele utilizar es el algodón orgánico aunque también hay prendas de bambú, lanza o lino.
Si bien es cierto que los textiles orgánicos son más costosos, los beneficios a largo plazo son inmensos en lo que respecta a calidad de piezas, protección del ambiente y a la salud del consumidor, ya que no genera alergias puesto que estas suelen estar ligadas a los químicos con los que son tratados los tejidos. El proceso de adoptar este tipo de telas será lento, pero no es imposible, en España ya existen varias marcas que se dedican al uso de este tipo de textiles para la realización de sus piezas, así como también existen empresas se dedican a la fabricación de este tipo de telas y que tienen una filosofía más humana y ecológica.
Indiscutiblemente mucho puede hablarse de la tecnología y del mundo textil, los avances son palpables y serán infinitos, ya que la creatividad del hombre no tiene límites. La tecnología nos ha permitido mejorar nuestra calidad de vida de formas insospechadas hace 50 años, y hoy hemos visto lo mucho que la sociedad, avanza junto con ella. Por lo que es indispensable que la industria textil se mantenga caminando de la mano de la tecnología de forma que pueda seguir generando cambios que beneficien el día a día del ciudadano de a pie, pero que a su vez, le otorgue a otros rubros, lo mejor en calidad para que sigan alcanzando nuevos avances.
El mundo textil es mucho más que la ropa que tenemos puesta, el mundo textil genera cambios a futuro en todos los ámbitos y en todos los rubros, la salud, la seguridad, la ciencia, la conservación del ambiente, la tecnología, etc. Por lo que todo avance que se genere en él, beneficia directa o indirectamente a toda la población, desde el chofer de transporte público, hasta los astronautas en el espacio.
Por lo cual, si buscamos emprender dentro del mundo textil, debemos sumarnos a las tendencias y usos tecnológicos que nos van a garantizar un espacio en él, no solamente con respecto a tejidos, sino también en la forma en la que llegamos al consumidor, de esta forma se va a conseguir que formemos parte del impulso económico que genera la industria textil para el mercado nacional e internacional de España, Europa y el mundo.