Los negocios van mutando y algunos, los que terminan siendo exitosos se adaptan a lo que busca el mercado. En la industria la maquinaria avanza a gran ritmo y el alto coste en muchos casos hace necesario optar por otras vías más económicas. Uno de los casos más interesantes de abordar es el de las carretillas elevadoras.
¿Qué ventajas tiene alquilar carretillas elevadoras para las empresas?
Hasta no hace demasiados años, las empresas acostumbraban a adquirir carretillas nuevas cuando era necesario hacer frente a la renovación de su flota. En la actualidad, con la aparición de Internet y la confianza en el comercio digital, se opta cada vez más por el alquiler de las mismas. Vamos a ver las razones.
Ahorro económico
Como es lógico, el alquiler de una carretilla elevadora es más barato que la compra de una. De esta forma se evitan los costes de la nueva y puedes adaptar el presupuesto con el que cuentes a las necesidades, tanto en cuanto a los plazos, como en base a la carga o trabajo que se requiera.
Optimización de los recursos disponibles
Como ahorras dinero con el alquiler de las mismas, se puede destinar ese dinero a otra clase de inversiones. En el mundo empresarial, la carga de trabajo, así como los gastos y los ingresos pueden cambiar, por lo que al optar por una maquinaria alquilada, la economía de la empresa no se ve comprometida.
Olvida el mantenimiento
En el alquiler, al contrario que con la compra, se puede ahorrar tiempo. Siempre se puede tener el vehículo preparado y en magníficas condiciones para ser utilizado.
La personalización
Una de las grandes ventajas que supone el alquiler de una máquina elevadora es la enorme varias de carretillas que vas a tener. En este sentido, hay muchas carretillas elevadoras que vas a poder alquilar puntualmente, además de infinidad de accesorios.
Personalización
El alquilar mediante renting las carretillas, como defienden los expertos en alquileres de carretillas elevadoras de Tomimaquinaria hace que los usuarios puedan tener el tiempo que precisen la maquinaria. Esto permite que puedan ser usadas en campañas definidas o incluso en un día en particular donde la demanda sea elevada o por más tiempo. Aquí es el cliente el que mandan y en su experiencia de más de dos décadas creen que es una inmejorable opción para muchos de los casos que se les presentan en su día a día.
Tipos de alquileres:
Por lo general, las empresas tienen una serie de alquileres dependiendo de lo que más solicitan sus clientes.
Sin conductor
Aquí es posible contar con el alquiler de la carretilla, pero como su propio nombre indica, solo es la maquinaria, por lo que el empresario debe tener personas profesionales que sepan manejarlas. Aquí las posibilidades son innumerables, pues en el mercado las hay eléctricas, que funcionan con diésel, etc.
Con conductor
Aquí vas a poder tener el servicio de operarios con años de experiencia que lo que hacen es conducir la máquina que deseas alquilar.
La opción de compra
Las carretillas con opción a compra son una buena manera de contar con la máquina en caso de que te interese, como ocurre con los coches.
¿Y comprar una carretilla elevadora de segunda mano?
Si piensas en comprar una carretilla elevadora de segunda mano, está bien saber algunas cosas.
Inspección de la carretilla elevadora
Esto ayuda a tener más información sobre el estado de las máquinas. En caso de que no controles mucho sobre el tema, siempre merece la pena mandar a personas que sean de tu confianza o un profesional que pueda inspeccionar la máquina en tu nombre. Así vas a saber si el precio que cuesta se ajusta a su estado.
Una buena forma de valorar el precio que se desea pagar mediante la investigación del precio de venta de las carretillas elevadoras en el mercado de segunda mano en los últimos dos años.
Todos estos valores y el dinero con el que cuentes, va a servir para establecer el máximo precio de compra que vas a querer pagar por la carretilla elevadora.
Algo importante es pensar en los impuestos que vas a tener que pagar antes de adquirir tu carretilla elevadora.
En cuanto al coste de la logística, hay que tener en cuenta de que es un factor de extrema importancia cuando valoramos comprar una carretilla elevadora en el mercado de segunda mano.
Documentación y las diversas certificaciones
No hay que olvidarse de la revisión del libro del mantenimiento, así como las reparaciones que se hayan hecho a la carretilla elevadora.
Igualmente, hay que pensar en los accesorios y diversos extras de la carretilla elevadora, además del estado en el que se encuentren. Las horquillas por ejemplo pueden dejarnos entrever el uso que todavía podemos darle al equipo, para así estar prevenidos, pues recordemos que una avería de este calibre puede tener un gran coste y las sustituciones suponen una inversión bastante alta.
Aunque el alquiler es una opción a nuestro juicio más acertada, en muchos casos, y en general adaptada más a los tiempos que vivimos, también nos parece que comprar una carretilla de segunda mano en ciertos casos también puede ser interesante.
En las dos opciones se aprecia un ahorro económico, aunque en el alquiler de las carretillas elevadoras vamos a tener una mayor confianza en el estado de la propia carretilla, pues se les suele llevar un mantenimiento de lo más pormenorizado.
El simil con los coches es bastante útil, pues realmente sería como ir con un coche de alquiler. Todos los que hemos ido en coche de alquiler, en la gran mayoría de las ocasiones hemos podido constatar de que están en un estado bastante bueno, entre otras cosas, porque al propio negocio le interesa tener bien el producto al que le sacan la rentabilidad.
Esto no ocurre en la maquinaria de segunda mano, donde podemos tener algunas carretillas que estén magníficamente cuidadas, con otras que no lo estén tanto o tengan una serie de vicios ocultos o averías de las que nos demos cuenta poco tiempo después de haberlas comprado.
Dos negocios que a veces se entrelazan y donde el cliente tiene que elegir la opción que más le convenza.